En estos días en los que Sergio Llull es noticia día tras día os traemos una historia poco conocida para el gran público del baloncesto.
Sergio que parece ser ha rechazado una mareante oferta de los Rockets para dar el salto a la NBA llegó al Real Madrid en junio de 2007 para «reforzar» al equipo de cara a los play off, resultaba raro que para reforzar al equipo llegara un chico de liga LEB, que además no disfrutaba de muchos minutos, pero vayamos unos meses atras.
El Real Madrid había pensado incorporar a LLull en pretemporada, le veían como un gran jugador de futuro, cosa que se ha confirmado con creces, estaban decididos a arriesgar con el fichaje pero de repente se puso a tiro Raúl López, el genial base de Vic salia del Akasvayu Girona y el Madrid lo aprovechó para que volviese a la casa blanca, el fichaje del joven jugador tendría que esperar, el club le siguió durante la temporada y antes de acabar la misma decidió que había llegado la hora.
Sergio estaba jugando menos de lo que en Madrid creían que era necesario y que tanto tiempo en el banquillo le estaba frenando la progresión como jugador y que había que sacarle de Manresa, en esos play off apenas jugó minuto y medio por partido pero la perla ya estaba en la que sería su casa por muchos años, desde entonces sus minutos y números no han parado de crecer hasta convertirse en uno de los 3 mejores bases de Europa.
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