¿Sabías que los Baltimore Bullets de 1953 tienen el dudoso honor de ser el peor equipo en haberse clasificado para los playoffs de la NBA en toda su historia?
Así es. En la temporada 1952/1953, los Bullets lograron meterse en los playoffs por el título tras acabar la temporada regular con una marca de 16 victorias y 54 derrotas, es decir, un 22,9% de partidos ganados. Es, de largo, la peor marca con que un equipo se ha metido en las eliminatorias por el título en toda la historia de la liga.
Por ejemplo, ese mismo año, los Indianapolis Olympians se metieron como últimos del Oeste y lo hicieron con un 39,4% de victorias (28-43). Olympians que desaparecerían al final de la temporada, pero esa es otra historia.
Estamos acostumbrados en los últimos años a ver equipos en la Conferencia Este que se meten en playoffs muy por debajo del 50% de victorias, pero un 22,9% es una marca que, por ejemplo, los mortecinos Lakers superan ampliamente (están en un 26,3%) y es comparable al 22,5% que actualmente lucen en todo su esplendor los Sixers. De hecho, solo Sixers, Knicks y Wolves en esta temporada estarían por detrás de los Bullets de la campaña 52/53.
En el verano de 1952, la liga la formaban 10 equipos divididos en dos Conferencias: Este, con Knicks, Syracuse Nationals, Celtics, Bullets y Philadelphia Warriors, y Oeste, con Minneapolis Lakers, Rochester Royals, Fort Wayne Pistons, los citados Olympians y Milwaukee Hawks. Era la séptima edición de una liga que poco a poco se iba consolidando y los Lakers venían de lograr su tercer anillo.
Los Bullets se habían quedado fuera de los playoffs un año antes tras acabar últimos del Este con 20 victorias y 46 derrotas, un 30,3% de victorias que mejora en mucho el 22,9% del siguiente año, pero que no les valió sin embargo para entrar en playoffs.
La temporada empezó con Chick Reiser al mando del equipo. Reiser se había hecho cargo del banquillo a mitad de la campaña anterior, logrando 8 victorias en 27 partidos. Sin embargo, pasados tres partidos (tres derrotas), dejaba su puesto en el banquillo a Clair Bee, que, con una dolorosa marca de 16 victorias y 51 derrotas, sin embargo se benefició de la pésima temporada de los Warriors (12-57) para meter al equipo en playoffs.
Hasta 20 jugadores pasaron por la plantilla de los de Baltimore esa campaña, destacando Don Barksdale, miembro del Salón de la Fama desde 2012, que llegó a jugar el All Star de ese año. Poco más se puede salvar de una plantilla que naufragó durante la temporada regular, pero que inesperadamente se metió en playoffs.
Playoffs en los que se verían las caras con los Knicks, campeones del Este, y que durarían muy poco: en tan solo dos partidos, los neoyorquinos se quitaron de en medio a su rival, tras imponerse 62-80 en el Madison y 90-81 en el Baltimore Coliseum.
Terminó así la aventura de unos Bullets que entraron en la NBA (BAA) en 1947 haciéndose con el título contra pronóstico y que desaparecerían tan solo año y medio después, tras renunciar a seguir en competición después de jugar los primeros 14 partidos de la temporada 54/55. Antes de eso, en la 53/54 aún les dio tiempo a establecer otra plusmarca que aún perdura, pero de todo esto ya hablaremos otro día…
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