Como anunció Adam Silver hace unos meses, el consejo directivo de la NBA ha modificado el sistema de acceso a los playoffs, tratando de compensar en lo posible las desigualdades existentes entre divisiones y que hasta ahora podían provocar que equipos con peores marcas quedaran por delante de otros a la hora de disputar la pretemporada y disfrutaran así de ventaja de campo.
El nuevo sistema elimina la regla que garantizaba a los campeones de División un puesto entre los cuatro primeros de la Conferencia y por tanto, la ventaja de campo en al menos la primera ronda de los playoffs. A partir de ahora, la clasificación de los ocho primeros equipos se hará únicamente atendiendo al registro de victorias y derrotas, sin importar en qué puesto hayan quedado en cada una de sus divisiones.
Además, en el caso de que se produjera un empate de victorias-derrotas, la clasificación se establecerá atendiendo a los resultados entre ambos equipos, de nuevo eliminando la ventaja que tenía el campeón de División en estos casos, criterio que será seguido solo si los resultados en los duelos directos dan un empate entre los dos equipos.
Aunque no resuelve el gran problema del desequilibrio actual entre las dos Conferencias, este cambio sí es al menos un paso en la buena dirección y permitirá que no se produzcan situaciones como la vivida el año pasado, cuando los Blazers, con la sexta mejor marca del Oeste fueron cabezas de serie por delante de Grizzlies y Spurs, que habían obtenido mejores resultados a lo largo de la fase regular. Los cambios se aplicarán ya en la próxima temporada.
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