Y después de todo el circo montado en torno al ascenso del Ourense, la asamblea ordinaria de la ACB, reunida hoy, ha tirado por tierra su ascenso y el del CB Tizona.
Por tanto, ni Gipuzkoa Basket ni Baloncesto Fuenlabrada perderán la categoría mientras los dos clubes que se ganaron el ascenso en la cancha no podrán participar en la Liga Endesa la próxima temporada.
Creo que el espectáculo ofrecido desde el pasado 15 de junio ya rebasa los límites permisibles. No se puede hacer más daño al baloncesto desde dentro y lo único que procede en estos momentos es que Francisco Roca presente su dimisión como presidente de la ACB.
El baloncesto español no merece estar en manos de personas que lo dañan con cada decisón que toman.
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