Los Chicago Bulls anunciaron ayer que hoy sería operado Derrick Rose de su lesión en el menisco medial de su rodilla derecha. A diferencia del protocolo seguido cuando sufrió la misma lesión en noviembre de 2013, esta vez se ha optado por una meniscectomía, es decir: se extirpará el menisco en lugar de repararlo, que es el tratamiento más conservador pero también el que más tiempo de recuperación necesita.
No se conocen detalles aún de la operación y no se sabe si se extirpará completamente el menisco o solo la parte dañada de este, así como tampoco se conoce el tiempo de recuperación necesario tras la operación, pero en estos casos suele rondar las seis semanas, lo que significa que jugador y equipo han optado por intentar llegar a tiempo a los playoffs de esta temporada.
La meniscectomía tiene la ventaja de reducir enormemente el tiempo de recuperación tras la lesión, pero tiene un peligro que hace un año y medio desaconsejó practicarla y es que al eliminar la almohadilla que supone le menisco, los huesos que forman la articulación de la rodilla entran en contacto directo entre sí al moverse, lo que se traduce en un riesgo muy elevado de padecer artritis. Artritis, que, sin ir más lejos, es la que está lastrando la carrera de Dwyane Wade desde que decidió en 2002, jugando aún en la universidad, pasar por este procedimiento para reparar una lesión de rodilla. Desde entonces y con el paso del tiempo, sus problemas en las rodillas se han ido agudizando con el paso del tiempo, sufriendo continuas recaídas por tendinitis y artirits en las rodillas, que hace tiempo que no le permiten alcanzar el nivel que le convirtió en MVP de las finales de 2006.
Rose, con 26 años, decide ahora que lo mejor es extirpar el menisco dañado. Llegará seguramente para ayudar a su equipo en los playoffs, pero está por ver en qué estado de forma y sobre todo mental se encuentra entonces. No olvidemos que esta temporada han sido pocos los partidos en los que se ha visto a un Derrick Rose cercano al que deslumbraba antes de que se lesionara en 2012. Es una incógnita su rendimiento a su vuelta y a cambio se corre el riesgo de acortar su carrera en la NBA (si es que esta carrera no está ya lo suficientemente en riesgo). Pero los Bulls tampoco pueden esperar mucho más para intentar ganar un anillo, con Butler que será agente libre restringido en verano, Pau Gasol muy veterano y Joakim Noah sano por primera vez en muchos meses. Todo ello con 41 millones de dólares comprometidos en el salario de Rose las dos próximas temporadas, lo que va a hacer muy complicada la reconstrucción de la franquicia. Por tanto, es ahora o nunca, deben haber pensado en Chicago.
Esperemos que la operación vaya bien y pronto podamos volver a ver al jugador en las canchas.
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