¿Sabías que…? Marciulionis pudo ser tenista en vez de jugador de baloncesto

¿Sabías que Sarunas Marciulionis solo se dedicó al baloncesto cuando fue rechazado como jugador de tenis por el sistema educativo soviético?

En efecto, Sarunas Marciulionis, de niño, no tenía ni idea de baloncesto. Por supuesto, en la Unión Soviética era prácticamente imposible que pudiera oír hablar de los grandes jugadores americanos de la NBA de su época, pero es que la cosa iba más allá:

Con 9 años, a Marciulionis lo que le gustaba era el tenis. Raro en Lituania, donde el baloncesto es el deporte rey, pero así era. El chico además no lo hacía nada mal y entre los 9 y los 11 años se proclamó sucesivamente campeón de Lituania de sus categorías. 

Pero tenía un defecto: Marciulionis es ambidextro. Es decir, maneja igual las dos manos y eso influyó en su carrera como tenista. Si la bola le venía a la derecha, cogía la raqueta con la mano derecha y golpeaba la bola. Si le venía a la izquierda, entonces se cambiaba la raqueta a la mano izquierda. Es decir: no golpeaba la bola de revés y se pasaba el partido cambiando la raqueta de una mano a otra. Aquello debía ser todo un espectáculo, pero no gustaba evidentemente a los rectores del deporte soviético.

En palabras del propio Marciulionis, se tradujo en que fue catalogado de esta manera: «No es un mal jugador lituano. Grandes condiciones. Mala técnica». En resumen, las autoridades soviéticas juzgaron inapropiada la técnica del joven Sarunas y le impidieron seguir con su incipiente carrera como tenista.

El sistema soviético de enseñanza del deporte se basaba en las Escuelas de Deporte, fundadas tan pronto como en la década de los 30 y responsables de los grandes éxitos deportivos de la Unión Soviética en el siglo XX. Pues bien: a Marciulionis se le cerró la puerta del tenis, pero en una de esas escuelas de deporte cayó en sus manos un balón de baloncesto y, afortunadamente, se abrió otra puerta. La buena.

Por suerte, el ser ambidextro le impidió al joven Sarunas jugar al tenis, pero al mismo tiempo le hizo convertirse en uno de los más grandes jugadores de baloncesto que ha dado Lituania.

Sarunas Marciulionis y Alexander Volkov fueron los primeros jugadores soviéticos en llegar a Estados Unidos. Eso dio lugar a muchas anécdotas que, si podemos, contaremos en futuros artículos. Además, Sarunas no es el único tenista frustrado que ha triunfado con la pelota naranja en las manos. Otro día tal vez hablemos de otro, un auténtico genio del baloncesto.

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